miércoles, 30 de mayo de 2012

Fracaso escolar

Hay momentos en la vida que nos marcan y nos definen de tal modo que ya nunca volvemos a ser los mismos. Son instantes que, especialmente en la infancia, nos marcan y nos definen como los seres humanos que seremos de mayores. Algunas veces, sin saberlo, tomamos el camino adecuado pero otras nos equivocamos y algunos, nunca aprendemos de los errores.
En este caso estaba yo en el cole, no recuerdo en qué curso pero tendría sobre los 12 años o asi (si, otra historia sosa de hace un porrón de años, lo siento), en una clase que ya no recuerdo.
La cuestión es que el profesor nos puso una sencilla pregunta en la pizarra; Al menos parecía sencilla pero al analizarla detenidamente y al discutirla con mi compañero MP (Magic Points desde ahora para mantener su anonimato) nos dimos cuenta de que era una pregunta con trampa y que la respuesta real era B en lugar de la obvia A.
El profesor comenzó a preguntar uno por uno y todos respondían lo mismo: A, A, A, A… Hasta que llegó el turno de Magic Points y dijo: B. Toda la clase se burló de él en el instante, ya sabemos como son de idiotas los crios; Pero Magic Points aguantó estoicamente el chaparrón de risas y comentarios y el profesor siguió preguntando. A, A, A, A… seguían las respuestas hasta que llegó mi turno.
Yo sabía que era B. Magic Points esperaba que dijera B, pero al parecer yo no estaba listo para aguantar las burlas de mis compañeros. No recuerdo si lo pensé o no, pero dije A.
No tengo claro si fue por las burlas, por miedo a ser diferente o por dudar en el último momento de mi propia certeza, pero dije A. Magic Points me miró entre sorprendido y decepcionado y yo me encogí de hombros.
Al final, claro, la respuesta fue B y mientras todos felicitaban a Magic Points por su deducción, yo me desintegraba en un rincón, mimetizado con la mugre de las esquinas.
Desde entonces he estado pensando en si mi vida habría sido diferente de haberme atrevido a decir B. En si esa pequeña humillación seguida del sabor de la victoria me habría condicionado para ser algo un poco mejor de lo que soy ahora.
Lo único que se es que si tuviera una máquina del tiempo volvería al colegio y aprovechando mi cuerpo adulto le patearía el culo a más de un niñato. Entonces veríamos quien se rie.

2 comentarios:

  1. Pobrecito. Ser diferente es duro, pero yo creo que al final lo superaste, ya que ahora eres bastante raro. Me gusta la historia pero no el aire deprimente que últimamente le das a todo...

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  2. Magic Points ese era un gran chico, lo digo porque era el más alto de la clase...

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