Los delfines son unos mamíferos que viven
en el agua. Vale. Los delfines se suponen muy inteligentes. También vale. Los
delfines quieren controlar a los humanos con sus poderes PSI y adueñarse del
mundo. ¿No os vale? Seguid leyendo y os convenceré.
Resulta que los científicos están
desconcertados, ya que están seguros de que los delfines poseen un lenguaje
complejo al nivel de “Oye, cómo te ha ido la tarde?” y “Pues bien, pero me
duele un poco la aleta dorsal, habré hecho algún mal gesto acuático”, pero a
pesar de ello son incapaces de descifrar una sola palabra. ¿Por qué? Muy
sencillo: Los delfines se cachondean de nosotros. Todos somos mamíferos,
evolucionados a partir de un mismo ser y cuya única diferencia es el entorno en
el que vivimos. Deberíamos entenderles pero no, ellos no quieren.
Pero pongámonos en su lugar utilizando un
supuesto perfectamente posible: Una noche
estamos paseando por el campo, cerca de un prostíbulo y de pronto nos
envuelve una luz dorada y nos teletransporta al interior de un ovni donde un
grupo de seres de otro universo quiere estudiarnos; pero como nos han tocado la
moral con su abducción, cada vez que nos preguntan algo respondemos
“Blublublubub” y cuando nos colocan los sensores para traducir nuestro lenguaje
decimos “Blebliblebibub” y los pobres no se aclaran. Pues eso es lo que nos
hacen los delfines. Confundirnos, desconcertarnos, mezclarse con nosotros y
estudiarnos para conocer nuestras debilidades y mandar toda la información a
sus colegas mar adentro que, haciéndose pasar por animalitos dóciles y
simpáticos, preparan el golpe final a
nuestra civilización.
Aqui tenemos una prueba clara d eque los delfines son muy inteligentes... y muy mamíferos. |
Que no os den pena, amantes de los
alimanes. Los delfines no viven en cautividad en nuestras piscinas por culpa de
la curiosidad y la codicia humana. Se dejan capturar, aprenden trucos cutres de
circo para que nadie sospeche y el día menos pensado los veremos emerger del
agua, flotando en el interior de una burbuja de agua y despojándonos de nuestra
dignidad y libertad.
Pero no debemos odiarles por ello,
simplemente reflexionemos. ¿No haríamos lo mismo nosotros en su lugar? Pues
eso.
PD: Si, ya sé que un delfín no es una profesión, pero tenía muy abandonada esa sección y algo tenía que poner.
Hace años que abogo por la paranoia y la prevención contra estos bichejos. Son peligrosos y nos han convencido de que son majos y sanos y buenos y los niños quieren trabajar con ellos y medicinales y... No. Son malos, son perversos, son inteligentes. Y vendrán a por nosotros si no hacemos algo antes.
ResponderEliminarLástima que quienes intuimos la verdad seamos tan vagos.
Hombre el de la foto sí que parece un LISTO!!! y un FRESCO!!!
ResponderEliminarY en cuanto a lo de la profesión, sí lo es si consideras solamente a aquellos que están infiltrados en nuestros acuarios y demás, puesto que son ESPÍAS. Y además, sí parece ser una GRAN profesión, tal y como está el patio: todo el día haciendo el moña, sin dar palo al agua, de vez en cuando una pirueta, manutención, alojamiento, si el jefe se pone chungo le dices eso de blublubleblu y a correr... seguro que hasta cotizan.