domingo, 7 de febrero de 2021

Kings in time escena 5: Ramiro

De nuevo en el apartamento, Cheng y Hasan miraban la tele mientras Sam se paseaba, esta vez con ropa, por la habitación contigua.

-¿Cómo has hecho para destrozar completamente un coche en apenas cinco segundos? –preguntó Hassan con curiosidad.

-La patada de la tortuga –respondió Cheng con solemnidad. –Una técnica tan antigua como el mismo mundo que…

-Las tortugas no pueden dar patadas. Tienen aletas –le interrumpió.

-No todas. Algunas tienen patas.

-Pero muy cortas. No se pueden dar patadas con esas patitas.

-Técnicamente si –defendió Cheng su técnica ancestral.

-Esto es absurdo… ¡Oye Sam! –Gritó a su otro compañero de piso. -¿Tu crees que una tortuga podría dar una patada?

Sam se tomó unos instantes para meditar la respuesta.

-Quizás si caminara y se tropezara con algún animal pequeñito, éste podría considerar que le han pateado –argumentó, y los otros dos se quedaron pensativos.

Tan pensativos estaban que ninguno de los tres logró fijarse en una figura vestida de negro que colgaba cabeza abajo de algún punto de la fachada del edificio y les espiaba. No era otro que Ramiro el espía. 

 


Ramiro, voyeur de naturaleza, había probado suerte como detective privado hacía algunos años, fracasando estrepitosamente cuando trataba de descubrir las infidelidades de un marido que se ausentaba demasiado de casa, según su esposa. Ramiro le siguió incansablemente durante semanas hasta que descubrió que lo que en realidad hacía el marido era dar clases de boxeo; desgraciadamente, el marido también descubrió a Ramiro y tuvieron una interesante discusión a base de puños en la que el marido esgrimió en todo momento mejores argumentos. Sin cobrar el trabajo y con una cara que no coincidía para nada con la que aparecía en su perfil de Facebook, Ramiro decidió cambiar de trabajo, momento en el cual se topó con un anuncio de Sultán buscando gente capaz para su organización. Una vez dentro, Ramiro no solo logró un trabajo bien remunerado como espía, sino que pudo aprovechar todos los cachivaches que había ido adquiriendo durante esos años.

Cuatro fotos y un video de dos minutos después, Ramiro comenzó a izar el cable que le mantenía unido a la terraza del edificio. Subía lentamente mientras ya saboreaba el dulce néctar del trabajo bien hecho cuando su ascenso se detuvo en seco. Parecía que algo había atascado la bobina de cable de la parte superior. Ramiro se incorporó, se agarró al cable y comenzó a subir de forma manual. Cuando llegó arriba se encontró con la figura de Cheng, sin camiseta, practicando tai-chi. Había colgado la prenda de ropa que le faltaba en el cable de ascenso, y eso lo había atascado. Trató de subir a la terraza de forma sibilina pero no le resultó fácil. Una rodilla le crujió y ello llamó la atención de Cheng, el cual adivinó que algo extraño estaba pasando y con un golpe seco con el dorso de la mano, cortó el cable de acero como si fuera un hilo de seda. Ramiro se precipitó al vacío en una caída de varios pisos.

En el hospital, Sultán trataba de comunicarse con Ramiro, el cual iba vendado de arriba abajo y apenas podía mover los labios.

-¿Me estás diciendo que te tiraron de la azotea de un quinto piso?

- Ssss… Ssss… Sssexto –Acertó a decir Ramiro.

-¿Y que esos dos no viven solos si no que tienen un tercer compañero?

-Un nnn… nnnee… negro.

-Entiendo… -comenzó a cavilar Sultán maliciosamente. –El chino es un tipo peligroso, sin duda, y ese árabe no se separa de él ni un segundo… Pero el tercer miembro, ese africano parece mucho más vulnerable. Si logramos secuestrarle y mantenerle como rehén, seguro que esos dos se dejan manipular a nuestro antojo y entonces…

Un relámpago iluminó el cielo a pesar de que la información meteorológica no anunciaba tormenta y dotó a la escena de un dramatismo inusitado.

-Llamad a mi agente especial. Él sabrá como encargarse de este asunto.

 

Y en el proximo capítulo... ¿Quien es en realidad Sultán?

3 comentarios:

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  2. pues a todo el mundo le cae mal Cheng, pero a mi me cae bien.

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  3. Esto empieza a parecerse peligrosamente a Mortadelo y Filemón 🤣🤣

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