martes, 18 de octubre de 2011

Empatía (Paternidad parte 8)

Lo que sin ninguna duda llevo peor de ser padre, es la sensibilidad que estoy desarrollando a marchas forzosas. No digo que antes yo fuera una bestia insensible, vacía y despiadada, pero me resultaba mucho más complicado el comprender ciertos sentimientos ajenos al menos en su totalidad. A ver si me explico.
Cuando nació mi pequeña, lo primero que se me pasó por la cabeza fueron todos esos casos de niños asesinados y desaparecidos (vease marta del Castillo y un largo y desafortunado etc...) y ello me hizo sentir mal; no acababa de entender porqué de repente no podía sacarme de la cabeza esas cosas que antes se me olvidaban facilmente al meterme en cualquier videojuego o actividad similar. Pero con el paso de semanas o meses, esos pensamientos se fueron acrecentando hasta límites que yo nunca había conocido. De pronto fuí capaz no solo d ehacerme cargo del dolor de esas personas sino de sentirlo en mis propias carnes con solo imaginar que yo pudiera verme en una situación similar. El hecho de pensar en una familia que cria a su hijo y vuelca en él sus esperanzas y sueños para un dia, de repente, descubrir que todo eso se convierte en una dolorosa nada, se me antoja demasiado oscuro para poder soportarlo.
Y hoy mismo, sin ir más lejos ha salido por la tele (gran invento de mierda), cómo atropellaban a una niña de dos años y la dejaban morirse desangrada en una calle de China mientras pasaban peatones y vehículos sin pararse a socorrerla solo porque viven en un país de mierda y están deshumanizados después de años y años de dictadura. Pero la niña no tenía la culpa de todo eso. No entraré en detalles, pero nunca pensé que podría llegar a sentirme tan mal por algo sucedido en la otra punta del mundo.
Lo llaman empatía y me parece un verdadero fastidio.

Sé que suelo escribir cosas graciosas y que me leeis por ello, pero no soy capaz de encontrarle el lado gracioso a ciertas cosas. Si alguien sabe reirse de los niños que s emueren por ahí que venga y me lo enseñe para que pueda escupirle en la cara.

1 comentario:

  1. Hay cosas terribles en el mundo que cuando te conviertes en padre/madre, te afectan mucho más... Y es que los niños son lo mejor del mundo y cualquier cosa que les pase, revuelve el estómago al más pintado.

    ResponderEliminar